Muchas personas, de manera consciente o inconsciente, piensan que las emociones son algo que deben controlar. La inteligencia emocional es básica para un desarrollo saludable y dinámico de el ser humano.
La mayoría de nosotros preferiríamos no enfrentar nuestras emociones, así que buscamos mecanismos para deshacernos de ellas. Sin embargo, la capacidad de vivir con emociones adversas es un indicador de la inteligencia emocional.
Se trata de una disciplina fundamental que no sólo nos permite entender mejor a las personas sino que, además, se encarga de poner a nuestro alcance herramientas que nos permiten afrontar mejor los problemas con los que nos confrontamos cada día.
¿Qué es la inteligencia emocional?
Desde hace mucho tiempo se ha considerado que las personas con altas capacidades intelectuales son las más adecuadas para desempeñar cargos de alta responsabilidad, o para trabajar en equipo.
Con el paso del tiempo, esto se ha convertido en un mito, ya que los estudios más recientes apuntan a que no existe una sola inteligencia humana, sino que hay muchas inteligencias diferentes, que van a determinar en igual o mayor medida el potencial que puede alcanzar una persona.
La inteligencia emocional es una de ellas, y sin ningún tipo de duda, esta juega un papel clave en el desarrollo de las personas, y en el éxito y la felicidad que alcanzarán a lo largo de la vida.
La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer, comprender e identificar los sentimientos propios y ajenos, así como sus causas y consecuencias. También se refiere al conjunto de habilidades que permiten gestionar dichos sentimientos para mejorar la convivencia social.
Esta capacidad no está directamente relacionada con el coeficiente intelectual. Por ello, existen personas con coeficiente elevado pero pobres en inteligencia emocional y viceversa.
La inteligencia emocional incluye tres dimensiones:
Atención: la capacidad de prestar atención a lo que nos rodea y de reaccionar al estímulo que nos llega.
Emoción: la capacidad de sentir y expresar emociones.
Autorregulación: la capacidad de controlar nuestras propias acciones y emociones.
Beneficios de una alta inteligencia emocional
Las personas con una elevada inteligencia emocional son capaces de controlar sus emociones y, en consecuencia, su actitud y comportamiento. Tienen más probabilidades de sobresalir en cualquier campo de actividad, especialmente porque tienen la capacidad de manejar personas y situaciones difíciles con facilidad.
La inteligencia emocional potencia tu capacidad para crear resultados positivos, por lo que serás más eficaz en el trabajo, en casa y en cualquier otro ámbito de la vida.
Las personas con alta inteligencia emocional son capaces de ver el lado positivo de las cosas, son más flexibles, más sociables y tienen mayor autoestima. La falta de esta habilidad puede tener consecuencias negativas en la vida personal y profesional.
Una mayor inteligencia emocional está asociada también a una mejor calidad de vida. Las personas con alta inteligencia emocional tienden a ser más sanas, por ejemplo, hacen menos visitas al médico, tienen menos niveles de estrés y menos enfermedades. También viven más tiempo que las personas con baja inteligencia emocional.
¿Cómo desarrollar la inteligencia emocional?
La inteligencia emocional es un rasgo innato, pero se puede desarrollar y mejorar. Como cualquier otra habilidad, se necesita tiempo, trabajo duro y práctica para ver mejoras o lograr un impacto sólido en la forma en que nos manejamos, interactuamos con los demás y logramos el éxito en nuestras vidas.
Hay muchas maneras de desarrollar tu inteligencia emocional. Lo más importante es tomar conciencia de las diferentes emociones asociadas a determinadas situaciones sociales, como la felicidad en respuesta a algo bueno y la tristeza en respuesta a algo malo.
A medida que seas más consciente de estas emociones, aprenderás a entender mejor cómo reaccionan las personas que te rodean ante diferentes cosas y por qué lo hacen, así como a reaccionar de manera óptima a lo que sucede en tu entorno.
Prácticas para potenciar la inteligencia emocional
La inteligencia emocional es una cualidad que los individuos pueden desarrollar y mejorar con el tiempo. Aquí tienes 7 actividades que te ayudarán a dominar tus emociones:
1. Practicar la atención plena y la meditación
2. Hacer un acto de bondad al azar cada día.
3. Leer un libro sobre inteligencia emocional
4. Ver un programa de televisión o una película que se centre en la inteligencia emocional
5. Hablar con alguien de confianza sobre cómo te sientes y por qué
6. Aprender una nueva habilidad, como hablar en público o pintar
7. Trabajar tu autoestima haciendo algo que te haga sentir bien contigo mismo
La inteligencia emocional es algo con lo que todos nacemos. Algunos hemos sido dotados de una mayor capacidad de inteligencia emocional que otros, pero el potencial está en todos y cada uno de nosotros. La inteligencia emocional puede aprenderse y desarrollarse con el tiempo, ya sea a través de la experiencia.
Desarrollar la inteligencia emocional a través de la superación personal es extremadamente importante para cualquiera que quiera convertirse en una persona positiva y comprender realmente a los demás.
A pesar de todos sus beneficios, la formación en Inteligencia Emocional aún no se ha integrado plenamente en la educación y los servicios sociales, en gran medida porque se considera algo que sólo pueden proporcionar los expertos. Sin embargo, esto podría cambiar pronto, así que nunca ha habido un mejor momento para dar el primer paso y empezar a aprender y aplicar la inteligencia emocional en el mundo real.
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